Cosas de vacaciones
Ya de vuelta de las vacaciones y como han sucedido muchas cosas en estos días, solo haré un breve comentario a algunas de ellas.
La peor de todas las noticias fue, sin duda, la del maremoto de Asia, donde más de 150.000 personas perdieron la vida, cientos de miles resultaron heridos y millones perdieron todo lo que tenían. Un desastre de la naturaleza que ahora los países más desarrollados intentan paliar con un desembolso de 3000 millones de euros. Unas cantidades que en una gran parte tendrán que ser devueltas con intereses, pues ya se sabe que la caridad no es gratuita sino todo lo contrario. Lo más triste de este asunto es que por 30 millones de euros se hubiera podido evitar toda esta desolación. Esa cantidad es la que hubiera costado un centro de detección de tsunamis, pero eso sólo está, hasta ahora, al alcance de los ricos con lo que se demuestra que los pobres siempre viven en el peor de los sitios posibles.
En Buenos Aires el incendio de una discoteca dejó 186 cadáveres sin que tampoco las autoridades respondan a las exigencias de responsabilidades por parte de sus familiares.
Irak sigue desangrándose en una guerra feroz y sin perspectiva de solución, con el goteo cada vez mayor de cadáveres y con unas elecciones imposibles a la vista.
El asesino Pinochet al fin será juzgado por alguno de sus crímenes lo que no deja de ser una buena noticia dentro de este cuadro.
Las pateras siguen arrojando cuerpos sin vida en el Estrecho, miles de personas, hombres, mujeres y niños que mueren en ese mar que se ha convertido en un inmenso ataud donde yacen las vidas, las esperanzas y los sueños.
En el terreno nacional, el plan Ibarreche fue aprobado con los votos de sus patrocinadores, el PNV y EA, de Esker Batua que anuncia que tiene otro plan pero vota este, y los decisivos votos de la rama política de la banda terrorista ETA, a pesar de que Ibarreche dijera que no aceptaría apoyos de estos asesinos.
Los españoles se quedaron varados en una autopista por una nevada y la señora ministra les echa la bronca por viajar. Ya sólo falta que nos prohiban salir a la calle para no coger la gripe, no vaya a ser que colapsemos los servicios de urgencia.
El Gobierno admite a Gibraltar como uno más en la mesa de negociaciones con lo cual se acepta una de las peticiones más importantes de Gibraltar sin que, a cambio, estos cedan en nada.
La conferencia episcopal sigue con sus caballos de batalla, es decir, los homosexuales, el preservativo, "la democracia sin valores" etc. Como todos sabemos, estos son los temas aparentes que preocupan a la Iglesia pero que, en realidad, están hablando de dinero.
El Gobierno nombra una comisión de "expertos" de quienes son conocidas sus opiniones favorables a llevar a Cataluña los llamados papeles de Salamanca y luego, escudándose en esa opinión, acepte el chantaje de los nacionalistas sin tener en cuenta la unidad de archivos y otras cosas. Yo no soy experto en este tema pero me parece que si esos papeles deben ir a Cataluña, otros papeles, retablos, joyas, cálices y documentos de todas clases que tienen en Cataluña y que pertenecen a Aragón, deberían seguir el camino inverso, pero todos sabemos que no se hará así pues existe una ley del embudo en este como en otros temas.
Ya seguiremos.
Cosas veredes...
La peor de todas las noticias fue, sin duda, la del maremoto de Asia, donde más de 150.000 personas perdieron la vida, cientos de miles resultaron heridos y millones perdieron todo lo que tenían. Un desastre de la naturaleza que ahora los países más desarrollados intentan paliar con un desembolso de 3000 millones de euros. Unas cantidades que en una gran parte tendrán que ser devueltas con intereses, pues ya se sabe que la caridad no es gratuita sino todo lo contrario. Lo más triste de este asunto es que por 30 millones de euros se hubiera podido evitar toda esta desolación. Esa cantidad es la que hubiera costado un centro de detección de tsunamis, pero eso sólo está, hasta ahora, al alcance de los ricos con lo que se demuestra que los pobres siempre viven en el peor de los sitios posibles.
En Buenos Aires el incendio de una discoteca dejó 186 cadáveres sin que tampoco las autoridades respondan a las exigencias de responsabilidades por parte de sus familiares.
Irak sigue desangrándose en una guerra feroz y sin perspectiva de solución, con el goteo cada vez mayor de cadáveres y con unas elecciones imposibles a la vista.
El asesino Pinochet al fin será juzgado por alguno de sus crímenes lo que no deja de ser una buena noticia dentro de este cuadro.
Las pateras siguen arrojando cuerpos sin vida en el Estrecho, miles de personas, hombres, mujeres y niños que mueren en ese mar que se ha convertido en un inmenso ataud donde yacen las vidas, las esperanzas y los sueños.
En el terreno nacional, el plan Ibarreche fue aprobado con los votos de sus patrocinadores, el PNV y EA, de Esker Batua que anuncia que tiene otro plan pero vota este, y los decisivos votos de la rama política de la banda terrorista ETA, a pesar de que Ibarreche dijera que no aceptaría apoyos de estos asesinos.
Los españoles se quedaron varados en una autopista por una nevada y la señora ministra les echa la bronca por viajar. Ya sólo falta que nos prohiban salir a la calle para no coger la gripe, no vaya a ser que colapsemos los servicios de urgencia.
El Gobierno admite a Gibraltar como uno más en la mesa de negociaciones con lo cual se acepta una de las peticiones más importantes de Gibraltar sin que, a cambio, estos cedan en nada.
La conferencia episcopal sigue con sus caballos de batalla, es decir, los homosexuales, el preservativo, "la democracia sin valores" etc. Como todos sabemos, estos son los temas aparentes que preocupan a la Iglesia pero que, en realidad, están hablando de dinero.
El Gobierno nombra una comisión de "expertos" de quienes son conocidas sus opiniones favorables a llevar a Cataluña los llamados papeles de Salamanca y luego, escudándose en esa opinión, acepte el chantaje de los nacionalistas sin tener en cuenta la unidad de archivos y otras cosas. Yo no soy experto en este tema pero me parece que si esos papeles deben ir a Cataluña, otros papeles, retablos, joyas, cálices y documentos de todas clases que tienen en Cataluña y que pertenecen a Aragón, deberían seguir el camino inverso, pero todos sabemos que no se hará así pues existe una ley del embudo en este como en otros temas.
Ya seguiremos.
Cosas veredes...
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